La CAONGD muestra su rechazo absoluto a la creación de la línea telefónica presentada por la Junta de Andalucía, y que entra en vigor mañana viernes, para la atención e información sobre la violencia intrafamiliar. Para la Coordinadora, se trata de una acción del Gobierno Andaluz que genera confusión en la población y que da respuesta al objetivo de VOX de negar la violencia machista, a quien deben el respaldo para la formación del actual ejecutivo autonómico.
La violencia machista existe y es obligación de los estados establecer políticas de prevención, protección, persecución penal y de coherencia con otras medidas para dar respuesta a la violencia que sufren las mujeres por el hecho de serlo. Así lo señala el Convenio de Estambul, que España ratificó en 2014. Ampliar las medidas políticas, legales y sociales para acabar con esta desigualdad que coloca a la mitad de la población en una situación de mayor vulnerabilidad ante la violencia es también responsabilidad de todos los poderes públicos, incluida la Junta de Andalucía.
El uso de una terminología concreta no es inocente ni gratuito. Al hablar de violencia intrafamiliar se está desdibujando la existencia de la violencia específica hacia las mujeres, dando a entender que todas las violencias que se ejercen sobre las personas convivientes tienen la misma consideración y responden a las mismas causas, negando que la base de la violencia contra las mujeres por parte de sus parejas y exparejas es el machismo y no la convivencia. Con ello, se cuestionan los mecanismos de respuesta a la violencia machista y los derechos conquistados hasta la fecha por parte de los movimientos feministas, a la vez que se genera una gran desinformación entre la población, más necesitada que nunca de educación para la igualdad y de información adecuada para contrarrestar los discursos negacionistas.
Según datos del Instituto Andaluz de la Mujer, durante el primer semestre de 2020 el Teléfono Andaluz de Atención a las Mujeres 900 200 999 recibió 19.520 llamadas pertinentes, 4.428 más que en el mismo periodo de 2019, lo que supone un incremento del 29,3%. De las 10.541 consultas generadas, el 52,6% estaba vinculada con violencia de género. Además, se gestionaron 396 acogimientos en los centros de acogida de Andalucía, un 15,4% más que en el mismo semestre de 2019. El 39,64% de los ingresos gestionados a través de la línea 900 se llevaron a cabo durante el confinamiento. No es casualidad. La situación derivada de la pandemia ha agrandado la brecha de género en todo el mundo: entre otras cuestiones, las mujeres asumen más carga de trabajo y cuidados y quedan más expuestas a la precariedad y la violencia.
Por otra parte, la creación de esta línea telefónica de atención a la violencia intrafamiliar tampoco responde a una necesidad no cubierta hasta la fecha, pues ya existían teléfonos específicos para colectivos como la infancia, las personas mayores y otras víctimas de violencia.
Desde la perspectiva de las ONG de Desarrollo andaluzas, es fundamental seguir hablando de violencia machista hacia las mujeres no solo por la respuesta que se le da en nuestra comunidad, sino por la orientación de la política pública de cooperación para el desarrollo en esta línea.
Según datos de ONU Mujeres, se estima que el 35 por ciento de las mujeres de todo el mundo ha sufrido violencia física o sexual por parte de un compañero sentimental o violencia sexual por parte de otra persona distinta a su compañero sentimental. Algunos datos: más de 87.000 mujeres son asesinadas cada año; las mujeres y niñas suponen el 72% de las víctimas de trata; hoy hay en el mundo 650 millones de mujeres y niñas que se casaron antes de cumplir los 18 años; más de 200 millones de mujeres y niñas entre 15 y 19 años de edad han sufrido la mutilación genital femenina en los 30 países en los que existen datos representativos sobre prevalencia; unos 15 millones de muchachas adolescentes de todo el mundo han sido obligadas a mantener relaciones sexuales forzadas en algún momento de sus vidas.